jueves, 30 de septiembre de 2010

Cómo vuela el tiempo y con aquellas mismas alas, mis sueños

Si filosofamos un poquito ambas cosas son relativas y al mismo tiempo proporcionales.

Que el tiempo vuele puede significar que las cosas marchan bien porque cuando eso sucede pareciera que pasa como escapándose de las manos, y por otro lado también quiere decir que hay mucho por hacer en tan poco tiempo...

Que los sueños vuelen puede significar que se vuelven más grandes, grosos! pero también que se hacen un poco más difíciles de alcanzar y que tomará más tiempo en que sean concretados..

Y aquí está el detalle: si se requerirá más tiempo para que los sueños sean alcanzados, pero a su vez, el tiempo está pasando más rápido... eso significa que cada día me encuentro más cerca de concretarlos?


martes, 28 de septiembre de 2010

El Derecho de Soñar

Estas palabras fueron escritas por Eduardo Galeano, escritor uruguayo o digamos mejor, el soñador uruguayo. Habla acerca de un mundo utópico en el que no estamos destinados a vivir, pero nos anima a creer en algún momento que es posible que sea realidad. Empieza más o menos así:

"...aunque no podemos adivinar el mundo que será, bien podemos imaginar el que queremos que sea. "

 

"Vaya uno a saber cómo será el mundo más allá del año 2000. Tenemos una única certeza: si todavía estamos ahí, para entonces ya seremos gente del siglo pasado y, peor todavía, seremos gente del pasado milenio.

Sin embargo, aunque no podemos adivinar el mundo que será, bien podemos imaginar el que queremos que sea. El derecho de soñar no figura en los treinta derechos humanos que las Naciones Unidas proclamaron en 1948. Pero si no fuera por él, y por las aguas que da de beber, los demás derechos se morirían de sed.

Deliremos, pues, por un ratito. El mundo, que está patas arriba, se pondrá sobre sus pies.

En las calles, los automóviles serán pisados por los perros.

Los cocineros no creeerán que a las langostas les encanta que las hiervan vivas.

La policía no será la maldición de quienes no puedan comprarla.

El aire estárá limpio de los venenos de las máquinas, y no tendrá más contaminación que la que emana de los miedos humanos y de las humanas pasiones.

Los historiadores no creerán que a los países les encanta ser invadidos. Los políticos no creerán que a los pobres les encanta comer promesas.

La justicia y la libertad, hermanas siamesas condenadas a vivir separadas, volverán a juntarse, bien pegaditas, espalda contra espalda.

La gente no será manejada por el automóvil, ni será programada por la computadora, ni será comprada por el supermercado, ni será mirada por el televisor.

El mundo ya no estará en guerra con los pobres, sino contra la pobreza, y la industria militar no tendrá más remedio que declararse en quiebra por siempre jamás.

Una mujer, negra, será presidente de Brasil y otra mujer, negra, será presidente de los Estados Unidos de América. Una mujer india gobernará Guatemala y otra, Perú.

El televisor dejará de ser el miembro más importante de la familia, y será tratado como la plancha o el lavarropas.

Nadie morirá de hambre, porque nadie morirá de indigestión.

En Argentina, las locas de la Plaza de Mayo serán un ejemplo de salud mental, porque ellas se negaron a olvidar en los tiempos de la amnesia obligatoria.

La gente trabajará para vivir, en lugar de vivir para trabajar.

Los niños de la calle no serán tratados como si fueran basura, porque no habrá niños de la calle.

La Santa Madre Iglesia corregirá algunas erratas de las piedras de Moisés: El sexto mandamiento ordenará: « Festejarás el cuerpo ». El noveno, que desconfía del deseo, lo declarará sagrado.

En ningún país irán presos los muchachos que se nieguen a hacer el servicio militar, sino los que quieran hacerlo.

Los niños ricos no serán tratados como si fueran dinero, porque no habrá niños ricos.

La Iglesia también dictará un undécimo mandamiento, que se le había olvidado al Señor: « Amarás a la naturaleza, de la que formas parte ».

Los economistas no llamarán nivel de vida al nivel de consumo, ni llamarán calidad de vida a la cantidad de cosas.

La educación no será el privilegio de quienes puedan pagarla.

Todos los penitentes serán celebrantes, y no habrá noche que no sea vivida como si fuera la última, ni día que no sea vivido como si fuera el primero."





domingo, 26 de septiembre de 2010

El Arte de Respirar

Respirar. Siempre lo hacemos, pero no nos damos cuenta.

Parece como que hemos perdido la noción de lo verdaderamente esencial y todo lo que nos pasa afuera, en el día a día, nos vuelve ciegos frente a lo que tenemos dentro nuestro funcionando como máquinas perfectas.

Hace 3 noches al acostarme en la cama, ya con las luces apagadas, me di cuenta realmente que respiraba. Suena tonto, pero ¿con cuánta seguridad podemos decir la cantidad de veces que pensamos en ello de la misma manera que las comidas que tuvimos en el día o el tiempo que miramos televisión? ...Son esos detalles los que nos echan en cara que algo tan importante pasa desapercibido.

Aquella vez, en la oscuridad de la noche y el silencio, pude realmente SENTIR de manera Conciente cómo el aire ingresaba por la nariz e iba recorriendo centímetro a centímetro llenando lentamente los pulmones que se iban inflando mientras mi pecho se ampliaba. Luego, con la exhalación, salía el aire que había ingresado calentando momentáneamente la puntita de la nariz.

Al levantarme y empezar una nueva rutina diaria olvidé este acto maravilloso y vital hasta que me acosté nuevamente.

¿Por qué no valoramos o apreciamos en el día lo que es esencial y vital para nuestra existencia? Sólo nos preocupamos por ello cuando nos hace falta, estamos enfermos o con la nariz tapada.

Por otro lado, son más los días que estamos sanos y menos los que estamos enfermos. En ambos casos igualmente nunca dejamos de respirar.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Las Mejores Palabras de Aliento en un Poema

Este poema de Mario Benedetti es uno de mis favoritos. Cuenta con las mejores Palabras de Aliento que haya podido leer en un poema.

Para empezar, el título simplemente ya es un primer fuerte mensaje:  
No te rindas.

No te rindas, aún estás a tiempo
de alcanzar y comenzar de nuevo,
aceptar tus sombras, enterrar tus miedos,
liberar el lastre, retomar el vuelo.
   
No te rindas que la vida es eso,
continuar el viaje,
perseguir tus sueños,
destrabar el tiempo,
correr los escombros y destapar el cielo.
   
No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda y se calle el viento,
aún hay fuego en tu alma,
aún hay vida en tus sueños,
porque la vida es tuya y tuyo también el deseo,
porque lo has querido y porque te quiero.
  
Porque existe el vino y el amor, es cierto,
porque no hay heridas que no cure el tiempo,
abrir las puertas quitar los cerrojos,
abandonar las murallas que te protegieron.
   
Vivir la vida y aceptar el reto,
recuperar la risa, ensayar el canto,
bajar la guardia y extender las manos,
desplegar las alas e intentar de nuevo,
celebrar la vida y retomar los cielos.
   
No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se ponga y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque cada día es un comienzo,
porque esta es la hora y el mejor momento,
porque no estás sola,
porque yo te quiero.



martes, 21 de septiembre de 2010

Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera

El título de este post lleva una frase de Pablo Neruda.
La primavera llegó en esta parte del hemisferio y nunca me había puesto a pensar en ella antes tanto como hoy.

Luego de lo crudo que haya podido ser el invierno toca a todas las puertas, se resistan o no, la primavera. Hace su aparición como quien dentro de una habitación con las persianas cerradas y ante un sol radiante, las abre. Inmediatamente la luz y el calor tocan como una cálida caricia, el rostro, parte del cuerpo y porqué no también, el corazón.


Que sea ésta una etapa para dejar atrás lo frío de nuestros inviernos, dejar los abrigos colgados y salir en búsqueda del sol.

FeLiZ este Día en el que el frío y espero también la Frialdad de las Almas sean condenadas a alejarse.